Fuente: El Cronista
En el marco del Foro Económico Internacional de las Américas, que se realizó con oradores de todo el mundo con foco en cómo reactivar la economía tras la pandemia de coronavirus, el argentino José Luis Manzano, presidente de Integra Capital, advirtió que, a raíz de la polarización ideológica y la consecuente falta de integración regional, “América latina está en una posición perfecta para tener una segunda década perdida“.
“Mientras la economía se ralentizó, el gobierno intervino para hacer frente a los efectos estanflacionarios de la pandemia”, dijo en referencia a las interrupciones en la cadena comercial, con el impacto en la inflación que no sólo viene de la flexibilización monetaria sino también de la interrupción en la cadena de suministro. “Esto está ocurriendo en el mundo de los altos ingresos, en el mundo de los países centrales”, apuntó.
“La región está muy polarizada ideológicamente, y la polarización ideológica ha destruido o paralizado los procesos de integración regional y el cambio electoral en algunos, o en muchos de los países, crea más precaución por el lado de la inversión”, explicó.
“Argentina -agregó- está en una negociación demasiado larga con el FMI, y una inflación del 50% y una inversión extranjera directa muy baja. Y en Brasil, la gestión de la pandemia aisló al país de la región y de la mayor parte del mundo”.
En ese contexto, señaló, no hay un diálogo articulado desde la región con organismos multilaterales y foros como la Cumbre de las Américas “se consideran un escenario para la discusión política en lugar de una herramienta para promover los negocios y la inversión“.
En todo caso, evaluó que América Latina “debería hacer un esfuerzo para comprometerse en el esfuerzo de reconstrucción” que está siendo liderado por Estados Unidos y Europa, y para eso “tiene que ofrecer un conjunto de políticas de compromiso, amigables con el mercado, con mucha inclusión social”.
“También, tratar de asignar parte de los Derechos Especiales de Giro (DEG) que han sido sobreasignados para atraer al sector privado a la reconstrucción, y convocar a las multilaterales como el BID y el Banco Mundial a crear una conversación común a la región sobre cómo recuperarse“, añadió.
“Sin eso -evaluó-, será un conjunto de países en el mismo lugar geográfico teniendo conversaciones individuales… Porque, por el milagro de la ciencia, todos pasaremos la página de la pandemia, porque las vacunas y el tratamiento terminarán el trabajo; la gente pasará la página y la región se desprenderá para tener la oportunidad de reconstruir mejor, de reconstruir verde”.
ONSHORING Y NEARSHORING
“Si la región quiere ver esa oportunidad de nearshoring, tiene que ofrecer certeza como aliado de Estados Unidos y de la Unión Europea. Y tiene que ofrecer certeza y compromiso a largo plazo, porque si eres el asesor del presidente Biden, o te sientas en la Comisión Europea y tienes que planificar tu suministro de cobre, litio, tierras raras para los próximos 30 años, no lo harás con un aliado que no sea fiable. Y no veo eso en la discusión sobre el liderazgo local. La región se ha fraccionado demasiado“, sentenció.
“Diría que la región se enfrenta a una situación, y creemos que puede ir mejor, mucho mejor o muy mal… y no sucederá a menos que haya una acción activa para volver a comprometer a la región con Estados Unidos y Europa“, afirmó.
GLOBALIZACIÓN, ANTES Y DESPUÉS DE LA PANDEMIA
En el marco de los temas que pasaron por el panel en el que participó junto al secretario de Comercio del estado norteamericano de Florida y CEO de Enterprise Florida, Jamal Sowell; el economista en jefe de Allianz, Ludovic Subran; el CEO de Nirvana Technology, Bill Harris, Manzano admitió que podría hacerse una “lectura política” de la pandemia en la que la conclusión fuera “deberíamos estar más aislados y esto no nos pasaría a nosotros”.
Pero apuntó enseguida: “Es una lectura absolutamente equivocada de la pandemia y es también un ejemplo de la falta de coordinación, de no tener protocolos de tratamiento”.
Sobre los aprendizajes de la pandemia en referencia al proceso de globalización, opinó que “tenemos que intentar recuperar la coordinación, la globalización, obviamente reconocer las identidades nacionales y las cuestiones de seguridad nacional, pero -recalcó- se necesitan coordinación y comercio internacional”.
“Así que la letra de la pandemia es que todos somos iguales. Todos podríamos haber muerto, o podríamos morir en la siguiente. Así que la necesidad de coordinación en el esfuerzo global es mucho mayor que nunca y la respuesta no puede ser el aislamiento”.